¿Cultura rumbo al vacío? Ensayos de Mario Vargas Llosa y el papel de la religión
Libro de ensayos del escritor peruano que cuestiona las raíces religiosas y políticas tras la decadencia cultural moderna.

Aunque he visto la película Pantaleón y las visitadoras (¡divertida y recomendable!), conozco poco las novelas de Mario Vargas Llosa, premio nobel de literatura, el escritor peruano que nos ha dejado este día 13.
¡Me gustaba! Una vez me recomendaron encarecidamente La casa verde —curiosamente, fue un profesor estadounidense—. Sin embargo, este libro de la foto, repleto de ensayos, reflexiones y provocaciones que me regalaron en 2013, lo leí y me marcó bastante.
Una reflexión profunda: como en las carreras de comunicación se suele estudiar la Escuela de Fráncfort, se aprende que la culpa, por así decirlo, del vaciamiento poético que se observa en las artes a lo largo de la historia, de la decadencia estética de lo que se entiende por belleza, así como del fin de la llamada «alta cultura», sería el resultado de la producción en serie, de la búsqueda del beneficio a gran escala, de la industria cultural: en suma, una consecuencia del capitalismo.
Para mi sorpresa, este libro me reveló un punto de vista diferente: la cuestión es política e implica la herencia de un revanchismo contra el gusto de la aristocracia (o de las clases altas) desde las revoluciones.
Se trata de un repudio creciente a la sociedad tradicional, tras las grandes guerras mundiales, y, en su esencia y sobre todo, de trasfondo religioso; al fin y al cabo, en el origen de todas las civilizaciones, en todas las épocas, las manifestaciones artísticas surgieron y se desarrollaron precisamente a partir de los ritos religiosos.
Se parte de la búsqueda de lo sublime, de las experiencias místicas, que posteriormente conformaron las bases de lo que entendemos por cultura. Un vínculo que se ha convertido en un mero eco en la vida occidental contemporánea, cuando no ha sido totalmente desterrado, execrado, en un mundo que, a su modo de ver, culturalmente se encamina hacia la nada.
O, como ya observamos ahora, hacia el contenido generado por inteligencia artificial.